Primera memoria es el primer volumen de la trilogía “Los
Mercaderes”.
Una trilogía sobre la Guerra Civil formada por:
- Primera Memoria (1959)
- Los soldados lloran de noche (1963)
- La trampa (1970)
- Primera Memoria (1959)
- Los soldados lloran de noche (1963)
- La trampa (1970)
La novela transcurre en tres escenarios: dos físicos y uno histórico. En la casa de la abuela, en una isla (una de la Islas Baleares) y en la Guerra Civil española.
Matia es la protagonista, es el reflejo de una niña que rompe con su edad en el peor ambiente posible, que no comprende su situación, no entiende nada de lo que está pasando a su alrededor e intenta salir como puede de su inquietud y desasosiego .Tiene 14 años y está en una de las llamadas “edades difíciles”. Le han alejado de su padre, que lucha en “el bando equivocado, es un rojo” y de su madre solo tiene un recuerdo difuso y confuso creado por lo que los adultos dicen de ella: “pobrecilla… lo que habrá pasado”
Los mayores representan un mundo oscuro, siniestro y al que de ninguna manera quiere parecerse y al final lo consigue. Matia es una chica sincera y veraz.
La relación de Matia con el mundo infantil es su primo Borja; un chico ruin, falso, interesado, hipócrita, ladrón y un ser frustrado. Es cruel con todo y con todos, pero a la vez es débil. Matia es mucho más fuerte y él lo sabe, acrecentándose con ello su impotencia.
Aparece como personaje esencial en la novela Manuel, todo lo contrario a Borja. Manuel representa la bondad y la integridad en un mundo soez, sucio y falso, es el único amigo de Matia y la única persona con la que se puede mostrar como realmente es y quiere ser.
El mundo de la guerra y la postguerra queda reflejado perfectamente en la novela y la necesidad imperiosa de sobreponerse a un posible futuro de pensamiento impuesto también.
Ana María Matute hace gala de una implacable ironía para descubrir y revelar la crueldad en un entorno dominado por la injusticia y la falsedad.